No es novedad que en ese canal sean pocos los que realmente estiman a Guerrero. Ni cuando era profesor en la San Martín pudo ganarse la empatía de los alumnos. Es más, una vez se enfrentó a una joven estudiante cuya amistad gozo en la actualidad.
Hace buen tiempo atrás la 'Ventana Indiscreta' de Cecilia Valenzuela mostró imágenes en donde se apreciaba el ingreso de Guerrero a la casa de su tocayo y mandatario de turno, Alejandro Toledo. En el informe, se afirmaba que antes de realizar una entrevista Jessica Tapia al líder del partido de chakana, se pactó el cuestionario para que todo se vea bien.
Al día siguiente, el reportero de barba prominente preguntó a mi amiga, actual redactora de Peru.21 y enamorada total de un joven diagramador, durante su clase cuál era el tema del día. Ella, muy suelta de huesos, dio como respuesta: "Su entrevista 'arreglada' con el presidente".
La chica se mostró incólume. En el otro lado de la moneda, el hombre llegó a la histeria. Le exigió pruebas a la delgada estudiante y amenazó con renunciar a la facultad. Advirtió que se retractaría si cualquier material audiovisual probaba alguna falta. La mano derecha de Delgado Parker se quitó iracundo del salón y fue a quejarse con las autoridades de la casa de estudios santa.
La chica se mostró incólume. En el otro lado de la moneda, el hombre llegó a la histeria. Le exigió pruebas a la delgada estudiante y amenazó con renunciar a la facultad. Advirtió que se retractaría si cualquier material audiovisual probaba alguna falta. La mano derecha de Delgado Parker se quitó iracundo del salón y fue a quejarse con las autoridades de la casa de estudios santa.
Ella nada tuvo que hacer porque al día siguiente el espacio de investigación de Frecuencia Latina sacó una segunda parte del informe. La misma Valenzuela se encargó se apoyar indirectamente a la fémina. La estocada final la dio la arequipeña.
La anécdota llegó hasta la prensa. Al día siguiente, el diario Extra dio a conocer esta información. No recuerdo cuántos semestres más pasaron, pero fue inminente la salida de Alejandro Guerrero de la San Martín. Yo felicité a mi amiga por no temer cualquier represión. El tiempo se encargó de sepultar aquel momento y ahora lo desempolvo como quien recuerda una salida con su gente a una discoteca.
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